Los reguladores en Alemania están prohibiendo la venta de relojes inteligentes para niños. Y están recomendandole a los los padres que se deshagan de los dispositivos existentes, ya que supone una amenaza importante para la privacidad.

En esencia, los relojes inteligentes se pueden rastrear fácilmente a través del GPS y revelan las ubicaciones de los niños. Si bien esto puede ser útil para algunos padres, es especialmente útil para los depredadores. Dar a los niños acceso de comunicación personal al mundo online, sin supervisión también es un problema de una manera similar. Los depredadores a menudo se hacen pasar por niños para atraer a las víctimas, y los smartwatches simplemente les hacen el trabajo más fácil.

El año pasado, varios juguetes revelaron que estaban recopilando datos sin que el usuario lo supiera. Esto incluye muñecas inteligentes y robots para niños. Los wearables son especialmente preocupantes ya que están en el usuario la mayor parte del tiempo. Y aquellos con intención maliciosa pueden tener acceso directo a estos dispositivos sin que los padres se den cuenta.

No es solo es Alemania quien ve a estos dispositivos como problemáticos . El mes pasado, la Organización Europea de Consumidores emitió una advertencias sobre los relojes inteligentes al expresar las mismas preocupaciones. El Consejo Noruego de Consumidores también describe específicamente cómo estos dispositivos son peligrosos y perjudican a los niños, en un informe que salio a la luz en octubre.

Esta próxima temporada navideña, un reloj análoga podría ser la forma más inteligente de hacer un regalo.